En el mercado existe una variedad de opciones de pisos, y puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza elegir uno que cumpla con nuestras expectativas como son calidad, durabilidad y mantenimiento.
Si estamos pensando en colocar un piso en nuestra casa, debemos considerar el área donde va a ser instalado y el deterioro al que será expuesto.
Para tener idea de lo que quieres debes estudiar ciertas terminologías utilizadas en el medio por los fabricantes, como revestimiento, piso flotante, piso laminado, linóleo, piso flexible, piso de caucho, baldosa de vinilo y contrapiso.
Los pisos más comunes son:
Pisos flexibles. Prácticos y con variedad de diseños, los venden en rollo y existen varios tipos: piso laminado, baldosa de compuestos de vinilo, baldosa de linóleo, baldosa de goma y piso de caucho.
Alfombras. Fabricadas con diferentes tipos de fibras sintéticas y naturales, no se aconseja su instalación en cocinas, baños o sótanos.
Pisos de madera. Pisos de mucha calidad, variedad de espesor y ancho y los podemos encontrar en una cantidad de presentaciones: tiras, tablas, laminados, con bonitos acabados.
Pisos laminados. Una opción más para decorar tu casa, son resistentes a la expansión y contracción, con una existencia en el mercado de más de 10 años.