¿Te invitaron a una boda y no sabes cómo vestirte?

Las bodas son eventos fuera de lo común, no son una fiesta cualquiera, es por eso que vestirse para una boda es algo que hay que pensar muy bien. Por una parte, hay que lucir espectacular, pero por otra, no hay que opacar a la novia. Además de eso, las bodas tienen un protocolo especial que hay que seguir. Vamos a ver algunos consejos para elegir un atuendo perfecto.

Boda de día

Si la boda es en horas diurnas, se debe elegir un vestido corto, sencillo pero elegante. Una buena idea es comprar vestidos de invitada de boda online, ya que es fácil y cómodo, todo el proceso se completa sin moverse de casa.

Una opción es elegir un minivestido en color champán, cubierto de flecos, y combinarlo con unos zapatos altos y cerrados en un tono similar. Los minivestidos son muy cómodos, elegantes y encajan perfectamente en una boda.

Otra idea es un minivestido asimétrico, en una tela ligeramente satinada. Se puede combinar con unos botines negros a media pierna que le van a dar un aire desenfadado.

El color rojo no está descartado, este tono es tan dramático que no necesita ningún elemento adicional para destacar. Un vestido rojo asimétrico, a media pierna, es ideal para una boda semiformal. Completar el atuendo con unos zapatos negros de tacón de aguja.

Si la boda es formal, entonces un vestido largo y abierto en el frente es una buena alternativa, el tono tostado es muy elegante y apropiado para una boda. Completar con zapatos negros brillantes, pero sin adornos.

Otra opción es un vestido azul claro, largo de vuelo, elaborado en varias capas superpuestas. Combinar con unas sandalias en un color claro, pueden ser blancos o beige. El cabello suelto sobre los hombros es el toque final de este atuendo.

Boda de noche

Las bodas de noche permiten accesorios con brillos y atuendos más elaborados, por ejemplo, los vestidos de Hinsomnia en Divinity, que son muy elegantes y originales.

Para una boda nocturna y elegante, un vestido en azul oscuro satinado, con una falda larga y amplia, con vuelo, el frente de tirantes y ceñido a la cintura, es muy apropiado. Esto se puede combinar con unos zapatos altos, negros o azules y un peinado suelto y con algunos rulos.

El color gris es muy elegante también y luce metalizado, dando una imagen vanguardista y sofisticada. Se puede elegir un vestido largo en este color, asimétrico y ajustado a la cintura. Los zapatos pueden ser plateados, negros o en un color contrastante.

Otra opción muy acertada es un vestido dorado, largo y con vuelo, logrado mediante varias capas de tela. Combinado con unos zapatos negros o dorados y un peinado recogido.

El plateado es una gran opción también. Un vestido tipo columna, con un escote cuadrado y falda suelta, es muy favorecedor; se puede completar con unos zapatos en un color contrastante, como rojos o borgoña. Un peinado recogido y alto es lo ideal.

Consejos para no desentonar

Como se dijo al principio, las bodas tienen protocolos diferentes en varios aspectos, incluyendo el código de vestuario, veamos algunos:

  • En una boda nunca se debe ir vestida de blanco o un color similar, tampoco de negro. Esto se debe a que ninguna invitada debe lucir parecido a la novia y el color negro está asociado a funerales.
  • Los escotes no deben ser pronunciados, esto es especialmente importante si la ceremonia es religiosa. Se aconseja siempre ser discreta con este aspecto, por respeto a la novia.
  • No está bien visto tampoco usar transparencias ni ningún diseño que insinúe desnudez.
  • No se debe ser demasiado extravagante o exagerada, hay que recordar que la protagonista de la noche debe ser la novia.

Lo más importante es ir bien arreglada, con un atuendo bien pensado. Ir  de forma descuidada puede interpretarse como que no se le ha dado la importancia suficiente al evento.