La principal ventaja de los tapetes personalizados, como bien indica su nombre, es que pueden personalizarse por completo desde principio a fin. En lugar de tener que elegir entre aquellos tapetes que se exponen en el escaparate de una tienda, gracias a Internet hoy en día cualquier persona puede comprar el tapete de sus sueños pudiendo elegir desde las dimensiones del mismo hasta el logo que desea que venga impreso sobre él.
Los empresarios conocen muy bien lo importante que resulta decorar un negocio de forma práctica y vistosa, de manera que resulta muy frecuente encontrarse con tapetes de todo tipo dentro de los negocios de una ciudad. Lo más habitual suele ser colocar al menos un tapete en la entrada del negocio para conseguir que los clientes no manchen el interior con la suciedad del exterior, y si dicho tapete tiene impreso el logo del negocio lo cierto es que el local en su conjunto transmite una imagen mucho más seria que invita a entrar en él antes que en otros negocios de la competencia.
Con este tipo de detalles se consigue que la clientela vuelva después de su experiencia y que, además, comparta la buena imagen que se ha llevado del negocio gracias a la distribución de objetos decorativos tales como los tapetes completamente personalizados. Aunque no lo parezca, un buen tapete marca la diferencia entre el éxito y el fracaso de cualquier negocio ya que es lo primero que ven los clientes ante sus ojos al entrar en un local.