Los logotipos, vulgarmente llamados logos, son la firma de identidad con la que los fabricantes se diferencian unos de otros. Al igual que la firma con rubrica es una seña personal de cada uno de nosotros, los fabricantes desarrollan marcas con logos exclusivos, a veces gastando grandes cantidades de dinero e invirtiendo en diseñadores para que les fabrique, diseñe y desarrolle una imagen que les haga sentirse orgullosos, una señal que con tan solo ver un trozo les atraiga a la mente de manera directa la marca completa. Por eso a veces cuando han conseguido el que creen que es su verdadera seña de identidad, se niegan a cambiarlo, y si lo hacen le realizan los cambios mínimos para no perderla.
Otro inconveniente de cambiar una marca es tener que renovar los artículos promocionales. Por ejemplo puede ser un verdadero problema si se tiene una caja de logos a los que no les podremos dar una salida si la marca cambia mucho. Si los cambios son mínimos estos detalles a veces pasan desapercibida.
Imagen de Greenmats