Los neumáticos gastados suponen un peligro para el medio ambiente si no se eliminan en las mejores condiciones. No es nada aconsejable quemarlos como se hacía antes, ya que se liberan a la atmósfera una cantidad inmensa de productos tóxicos, nocivos y venenosos que son muy contaminantes y pueden convertirse en un peligro para la salud. Por eso es muy importante concienciarnos de llevar nuestros neumáticos viejos a puntos de recogida debidamente autorizados, que se encargarán de tratarlos de la mejor manera posible.
De hecho es posible que incluso les den otra vida a estos elementos, ya que actualmente se utiliza el caucho para reciclarlo y con él fabricar suelos elásticos, logo mats, suelos de pvc o vinilo e incluso se puede volver a fundir y reutilizar como si fuera material nuevo. Por eso es muy importante que no dejemos nuestras ruedas viejas en cualquier sitio expuestos a la intemperie, llevémoslos a algún lugar donde sepamos que se les va a dar una nueva utilidad.