Videncia y tarot
¿Realmente el tarot puede predecir el futuro?
Contrario a lo que comúnmente se piensa, el tarot no es un mecanismo de predicción exacta del destino de cada persona, sino basado en creencias, suposiciones y condiciones atribuidas a cada carta. Para poder explicar lo que se cree, según la tradición y conocimientos que se han transmitido desde tiempos remotos, según lo que quiere decir cada carta.
Ahora bien, la llamada “videncia”, se define como una cualidad, virtud o hasta poder, de ver más allá de lo evidente, de lo tangible y real. No es una condición que la persona haya elegido desarrollar, sino un don con el cual nace y muchas veces no llega a perfeccionar, aprender y conocer esta habilidad.
La persona vidente, no necesita cartas, instrumentos, o artefactos para ver lo que está más allá de la comprensión tanto propio como de los demás. En la mayoría de los casos, las predicciones no se buscan sino que se reciben sin explicación ni espera. Es decir, que no necesariamente es el tarot un instrumento necesario para la habilidad de la videncia.
En este aspecto, entran en juego las llamadas, premoniciones, visiones, clarividencia (ver claramente lo intangible). A algunas personas con estos dones, se les llama “profetas”, a otros, “videntes”. Pero la palabra profeta, no define a una persona con estas cualidades, sino a aquel que trae un mensaje de un ser superior (los profetas anuncian los mensajes de Dios, según la biblia).
¿Qué tiene que ver el tarot con la videncia?
Esta relación, guarda más inclinación hacia lo que interpreta el consultante al momento de hacer la tirada de cartas para la lectura. Aunque cada símbolo, cada baraja y número de ésta, tiene un significado preestablecido. La comparación entre lo que representa la carta descubierta y lo que interpreta y explica el consultante, es lo que se podría ligar a la videncia, el ir mas allá de lo que se aprecia a simple vista. La conjugación entre lo que significan las cartas y lo que él cree que están señalando.