Entre los productores y profesionales de la industria cinematográfica, se suele decir que «Los caminos de Hollywood a la hora de ganar dinero, son inescrutables». La maquinaria del cine, con los principales estudios a la cabeza, siempre está en busca de nuevas historias y argumentos que llevar a la gran pantalla. La agonía de una industria que parece falta de ideas y guiones arriesgados por los que muchas veces no se suele apostar, les ha llevado a poner la vista en los medios del mundo del entretenimiento, como los videojuegos.
Hollywood ha tenido animadversión por dar luz a alguna película sobre videojuegos. Exceptuando la serie cinematográfica de «Resident Evil», lo cierto es que los resultados en taquilla, mala calidad y las críticas del público de muchas producciones, han ido encasillando más de un proyecto prometedor.
Como aficionados y jugadores, muchas de estas películas basadas en videojuegos han resultado ser una basura, que destroza videojuegos espectaculares. Capaces de malgastar una licencia o enterrar la carrera de más de un director, los films basados en videojuegos han tenido un historial un tanto decepcionante. Antes de ver lo que se avecina, repasamos los antecedentes tumultuosos relacionados entre el ocio electrónico y el séptimo arte.
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