A la hora de equipar convenientemente un comercio llega siempre un momento en el que se plantean algunos interrogantes que conviene tener en cuenta y que algunas veces pueden parecer asuntos de poca importancia o incluso trivialidades, pero debemos tener en cuenta que en muchas ocasiones son los pequeños detalles los que acabarán por redondear el éxito de un negocio, sobre todo si ya hay alguno de similares características por la zona.
Uno de estos aspectos en apariencia poco importantes tiene que ver con la elección de mostradores para comercio, que pueden ser simples muebles altos desde los que atendamos a los clientes o vitrinas en las que exponer nuestro género para que quien entre pueda decidir lo que desea.
La elección depende mucho del tipo de comercio que tengamos pensado abrir, claro está, sobre todo cuando lo que queremos es ofrecer productos que se puedan adquirir en el propio establecimiento para consumo inmediato o llevarlos a casa, en cuyo caso lo más apropiado es contar con al menos una vitrina en la que exponer dichos productos.
En el caso de que sea otro tipo de actividad o servicio lo que vayamos a ofrecer en nuestro negocio seguramente lo más recomendable será tener un mostrador a modo de zona de atención al cliente, en la que ofrecer a todo el que entre tanto la información que requiera como al posibilidad de adquirir el producto o pagar lo que ellos mismos hayan cogido de la tienda como en el caso de los negocios del mundo de la moda.