Actualmente me dedico al negocio de la hostelería. Tengo un restaurante en el centro de Madrid donde servimos especialmente patatas fritas y pollo.Tras mis viajes por Europa descubrí que faltaba en la capital de España el típico puesto de patatas que podemos encontrar al pasear por las calles de Holanda, Bélgica…Por eso me lancé a montar aquí el negocio.
Como está en el centro, mucha gente entra a llevarse un cono de patatas recién hechas para coger fuerzas y seguir paseando o comprando ropa. Tiene pocas mesas, porque esta pensado especialmente para pedir “para llevar”, pero si alguien quiere sentarse, también puede hacerlo. He necesitado bastantes cosas para poner este proyecto en marcha, pero ha sido importante la compra de una buena freidora industrial.
Una freidora industrial de calidad y además…
Varias piezas han sido imprescindibles para montar el negocio. Conseguir un local bien localizado en la capital, obtener materia prima de calidad y por supuesto, comprar la mejor freidora industrial. Una de las razones que hacen únicas nuestras patatas es la maquinaria que utilizamos.
Nos costó encontrar una buena freidora industrial, pero tuvimos suerte gracias a la amplia variedad de oferta que hay en Madrid. El resultado es fantástico, unas patatas doradas y crujientes sin ser grasientas. La verdad es que si piensas en montar un negocio de este tipo, no te la juegues con la maquinaria, ya que es una de las cosas más importantes para ofrecer buenos productos.
Buena freidora industrial = más clientes
La materia prima y la freidora que utilizamos han conseguido que cada día, los ciudadanos de Madrid y los extranjeros se pasen por nuestro local aprobar nuestras magníficas patatas! Por eso, el dinero invertido en la freidora industriales nos ha compensado sin lugar a dudas