El verano ya está a la vuelta de la esquina. Muchos apuran por apuntarse corriendo al gimnasio ya que creen que con un par de semanas de ejercicio van a arreglar lo que no han hecho en todo el año, pero lo cierto es que la experiencia de los profesionales de los gimnasios demuestra que solamente la constancia y el esfuerzo continuo son capaces de hacer que las mancuernas puedan llegar a tener algún resultado en el cuerpo de la persona que se está ejercitando.
Aunque por otro lado también hay que tener muy claro que nunca es tarde para apuntarse al gimnasio, por lo que si uno realmente tiene la intención de apuntarse en verano con vistas a trabajar el cuerpo durante todo el año, no hay que tener ninguna vergüenza en hacerlo ya que en ese caso no hay ninguna razón para sospechar de las intenciones de la persona que se apunta al gimnasio por primera vez en su vida.
Lo más importante es apuntarse y mantenerse constante durante todo el tiempo que sea posible, e igual de importante es no aprovechar ninguna excusa para no ir al gimnasio durante X días; los exámenes por ejemplo no son un motivo para faltar a la sesión diaria, ya que hay que buscar un hueco siempre que sea posible y si hace falta ir en otro horario a entrenar no queda más remedio que hacerlo. Ese esfuerzo queda recompensado con el paso del tiempo, y si se acompaña de constancia el éxito está más cerca que nunca.