A los niños les encantan las fiestas. Su energía y alegría de vivir se puede apreciar cuando les invitamos a organizar con nosotros cualquier pequeña reunión con sus amigos, no hace falta que sea por alguna razón en concreto. Unos globos y un bizcocho es más que suficiente para que un grupo de amigos se entretenga y se divierta toda una tarde, ya que con un poco de imaginación se pueden conseguir maravillas.
Colocamos una gran cartulina y les damos una más pequeña a cada uno y unas pinturas. Que cada uno pinte lo que más les guste y al terminar pongan su nombre. Luego pegamos los dibujos a la cartulina grande y montamos una fiesta infantil con el que se alegrarán al ver somos va tomando forma, incluso podríamos preguntarles a ellos el lugar más adecuado para cada una de las obras. Así de sencillo.
Como es lógico, si podemos permitírnoslo podríamos organizar una fiesta por todo lo alto, preparando algo más elaborado y hasta contratar los servicios de un animador o dedicarnos nosotros mismos a esta labor. Aun así podríamos incluir la actividad predicha antes, o con la ayuda de una cámara tipo Polaroid hacer fotos de la fiesta e ir poniéndolas en un tablón de corcho hasta llenarlo por completo.
¡Seguro que a los niños les encanta la idea! Y a más de un adulto también.
Con un poco de imaginación y algunas cosas más, seguro que cualquiera de nosotros podemos organizar actividades lúdicas para niños, jóvenes y mayores sin la necesidad de tener que gastar grandes cantidades de dinero. Sobre todo ahora que el dinero es un bien que cada vez escasea más, se hace aún más necesario no tener que renunciar a la realización de eventos entretenidos con los que pasar unos momentos agradables y huir de la monotonía.