El otro día tuve la oportunidad de estar presente en entrevistas con famosos ya que una amiga es periodista y me dijo que podría acompañarla para ver en persona lo que se siente y cómo son las entrevistas con famosos.
Antes de llegar la persona a la que íbamos a entrevistar tuvimos que estar un rato esperando a que terminasen de maquillar y de peinar a la famosa Drew Barrymore, y es que resulta que antes de aparecer delante de una cámara necesitas que te maquillen de una forma especial, un color que no tenga relación con el fondo dónde te graban porque si no se verá bien grabados las entrevistas con famosos.
Después del tipo de maquillaje y del peinado elegido y terminado por la persona especialista llegó por fin a la entrevista, se la veía muy natural y encantadora, cosa que por otro lado yo estaba muy nerviosa ya que nunca había tenido la oportunidad de asistir en persona a entrevistas con famosos.
La entrevista constó de muchas preguntas acerca de sus últimos trabajos, de los proyectos que tenía futuros y de su vida amorosa de la cual no quiso hablar mucho y es que la famosa no suele dar exclusivas ni hablar sobre su vida privada.
La pregunta que más me gustó fue la de cómo había afectado en su vida haber aparecido en la película de E.T.E cuando era tan pequeña, y la respuesta fue que para ella aparecer en aquella película y la oportunidad que le dieron fue maravillosa ya que gracias a ella dio el paso al mundo del cine al cual de dedica actualmente, pero confesó que su infancia había sido un poco dura ya que cuando eres tan pequeño y famosos no puedes tener una vida normal.
La semana pasada estuve en un centro de belleza en Madrid y me quede realmente impresionada por la profesionalidad del centro. Pensaba que íbamos a la típica peluquería de barrio o algo un poco más serio, pero nada de eso fuimos a un verdadero centro de belleza especializado y pionero en estilismo en Madrid.
Estaba ubicado en pleno centro de Madrid en el barrio salamanca. Por fuera no parecía lo que realmente es. Por fuera parece una 
peluquería bastante decente pero no parece un centro de estilismo de estas características. Cuando entramos nos pasaron a una sala de reuniones en la que nos ofrecieron de beber mientras venían las personas encargadas y digo las personas encargadas porque vinieron 3 personas del centro. Por lo tanto en la sala éramos 7 personas decidiendo que tipo de peinado le hacíamos a mi amiga. A todo esto no os he dicho que fui porque era la boda de una amiga de toda la vida. La cuestión es que estuvimos allí los 7 durante casi dos horas hablando del peinado de mi amiga. Nunca me lo hubiese imaginado, que me iba a tirar con 7 personas hablando de un peinado. Si lo llego a saber ni de coña voy. Al principio me hizo gracia pero cuando habíamos visto unas 30 diapositivas de peinados no sabía ni que decir ni dónde meterme.
Por lo menos el resultado fue realmente espectacular ya que le hicieron un peinado precioso y que realmente iba con ella, era un peinado adaptado a su personalidad. Estaba guapísima
