Hace algunos años nadie hubiera imaginado la posibilidad decorar una vivienda pudiendo personalizar hasta el más mínimo detalle, ya que lo más frecuente era acudir a las tiendas de barrio para comprar aquellos objetos decorativos que más le gustasen a uno sin tener si quiera en consideración la posibilidad de personalizar el objeto por criterio propio; a día de hoy cualquier persona puede tener sus propios tapetes personalizados para disfrutar de un decorado acorde a sus gustos, sin que ello suponga un gran desembolso de dinero y especialmente sin que uno tenga que desplazarse de su casa ya que la personalización del tapete se realiza a través de Internet.
Si uno comprueba la decoración que existe en las casas de amigos y familiares probablemente se dará cuenta de que la mayoría de objetos decorativos son los típicos que se venden en las tiendas, sin que transmitan ninguna sensación especial en cuanto a los gustos de las personas que viven allí.
Pero los tapetes personalizados son completamente diferentes ya que uno puede estampar en su superficie aquella imagen que más le plazca, pudiendo incluso diseñar un tapete con la foto de la boda o con la foto del hijo o hija de la pareja que vive en esa vivienda. Estos pequeños “trucos” de decoración no son muy frecuentes, de forma que si uno busca sorprender a sus invitados desde luego tiene que hacer uso de alguna de estas técnicas de personalización.