Cambiar platos de ducha en Madrid no es algo excesivamente complicado teniendo en cuenta la gran cantidad de empresas de reformas de baño que existe en una ciudad tan grande como esta. La verdadera dificultad reside en la elección del plato de ducha e, incluso si uno se remonta al momento de planificar la reforma, a la decisión de elegir entre una bañera y una ducha con mampara de las que actualmente se instalan de serie en gran parte de las viviendas de nueva construcción.
Los platos de ducha están especialmente recomendados para personas mayores, dado que en comparación a la bañera resulta mucho más seguros en diferentes aspectos. Para empezar, el plato de ducha es muchísimo más accesible que una bañera dado que la persona mayor puede entrar y salir en él con total comodidad habiendo de por medio solamente un pequeño escalón. En cambio, para entrar y salir de la bañera hay que realizar un esfuerzo que las personas mayores quizás no puedan aceptar a ciertas edades.
En el aspecto de la seguridad, la ducha también resulta notablemente más ventajosa frente a la bañera. Dentro del plato de la ducha se pueden instalar unas pequeñas gomas adheribles que evitan cualquier riesgo de caída, mientras que a los lados de la ducha también se pueden instalar unos soportes de plástico que permitan a la persona mayor agarrarse en el caso de que fuera a caerse.
En resumidas cuentas, las ventajas de la ducha frente a la bañera son más que evidentes. Además, hoy en día las tendencias decorativas prácticamente han excluido por completo las tradicionales bañeras, de manera que la decisión está más que clara incluso antes de que uno pueda llegar a plantearse reformar el baño. Si a ello se le suma el buen precio de los platos de ducha actuales, poco más se puede decir
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